La arquitectura siempre ha funcionado como una fotografía o una síntesis de la forma de vivir de la humanidad en un periodo de tiempo. A partir de la revolución industrial con la introducción de nuevos materiales, herramientas de reproducción mediática y nuevos medios de transporte, se transformó la idea tradicional del espacio interior, un espacio cerrado, en un diálogo entre el interior y el exterior. Así como una negociación sobre la privacidad de los espacios.

Experimento Habitacional 3:2 tiene como intención cuestionar los límites físicos y visuales de la forma de habitar de una familia actual. Pretende crear un espacio visualmente conectado y continuo delimitando espacios por una frontera borrosa entre las zonas privadas y públicas de la casa.

El proyecto se divide en 4 zonas: Las habitaciones en la zona privada; biblioteca – estudio en la zona semi-privada; sala – comedor – jardín en la zona pública y una zona de servicio. La privada abre hacia la semi-privada y esta a su vez abre hacia la parte más pública. De esta manera fomentamos la convivencia entre los habitantes de la casa sin perder la esencia de los espacios.

Sus grandes ventanales hacia el sur hacen que sea una casa muy confortable y la poca diversidad de sus materiales le dan un aspecto contemporáneo pero atemporal.